El trazado, de 25 kilómetros de longitud, se inicia en Baredo (Baiona), en la carretera PO-552 (Finisterre-Tui), mediante una glorieta que canalizará el tráfico entre la mencionada carretera y la autopista. Este enlace direccional permite el acceso a la autopista desde el norte de Baiona y además conecta con la futura Avenida de Baiona, a través del Ramal de Sabarís, de aproximadamente un kilómetro de longitud.

A la altura del kilómetro 8+700, se salva el río Miñor y la carretera PO-340 (Gondomar- A Ramallosa), mediante una importante estructura de 395 metros de longitud. Con esta carretera se realiza el Enlace de la Ramallosa, direccional norte, que se resuleve mediante una glorieta.

En el kilómetro 10+900, se sitúa el enlace de Gondomar, que une la Autopista con la carretera local entre Gondomar y la comarcal PO-332. También en esta zona, se resuelve el entronque entre el Ramal de Nigrán y la Autopista, permitiendo el acceso directo desde ésta hasta la localidad de Nigrán y su entorno. Su longitud es de tres kilómetros, con sección tipo autopista y permite la conexión con las carreteras PO-325 y PO-552 (Vigo-Baiona) mediante dos glorietas.

Autoestradas AG-57

En el kilómetro 16+500, se atraviesa una amplia vaguada, por la que baja el río Zamáns, que se salva mediante un viaducto de 365 metros de longitud. Al final del mismo, la Autopista cruza por debajo de la carretera PO-331 (Porriño-Gondomar), desenvolviéndose a continuación el Enlace de Vincios, que permite todos los movimientos posibles de la Autopista con la citada carretera. En el kilómetro 18+940 se cruza de nuevo la carretera PO-331, esta por encima de la misma.

A partir del kilómetro 20+900 se desarrolla el Intercambiador con el futuro segundo cinturón de Vigo, permitiéndose por su configuración, realizar todos los movimientos posibles entre la Autopista y éste.

A la altura del kilómetro 23+400, sobre el río Eifonso, se salva el mismo mediante un viaducto de 240 metros de longitud.

Por último, la autopista finaliza en las proximidades de Rebullón, iniciándose el Intercambiador de Rebullón, que sirve de conexión con la Autopista del Atlántico (AP-9). Este intercambiador permitirá todos los movimientos posibles entre las dos autopistas y la conexión con la Autovía de las Rías Bajas a través del Enlace de Puxeiros.